Page 92 - Impreso
P. 92

90
d. La formación integral de los agentes de pastoral
es un área a fortalecer. Se necesitan más personas capaci-
tadas en la Palabra de Dios, en habilidades pastorales y en la
promoción de ambientes más sanos en las parroquias.
173. Se reconocen los esfuerzos de la catequesis; sin em-
bargo, se percibe dificultad para asumir los procesos en línea
de vida, de iniciación cristiana y formación de adultos.
2. Voz de nuestros pastores, magisterio
a. Renovación de la Iglesia
174. El Concilio Vaticano II mencionó que la renovación de
la Iglesia consiste en el aumento de la fidelidad a su vocación
(Unitatis redintegratio 6). La Iglesia existe para evangelizar; por
eso, desde su comienzo y teniendo clara su misión, la Iglesia
vio la necesidad de buscar las mejores herramientas para
anunciar el Evangelio en culturas y mentalidades ajenas a las
de los primeros discípulos. Con el tiempo se crearon diversas
estructuras para favorecer el anuncio y el acompañamiento
de las comunidades nacientes. Al día de hoy, no podemos
pretender que las estructuras que han funcionado en otros
momentos históricos, culturales y sociales, funcionen para la
realidad actual (cfr. EG 26).
b. La parroquia
175. Desde su origen, la parroquia se plantea como res-
puesta a una precisa exigencia pastoral: acercar el Evangelio
al pueblo a través del anuncio de la fe y de la celebración de
los sacramentos y responde a la lógica de la Encarnación
de Jesucristo, vivo y activo en la comunidad humana (cfr.
Instrucción La conversión pastoral de la comunidad parro-
quial al servicio de la misión evangelizadora, 7). La parroquia
representa, en cierto modo, a la Iglesia visible establecida en
toda la tierra (cfr. Sacrosantum concilium 42). Más que una



































































   90   91   92   93   94