Page 27 - Impreso

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61. El mensaje del Evangelio es una llamada a la acción,
a salir de nuestra comodidad y compartir la buena nueva
con todos los que nos rodean. El Evangelio es un mensaje de
esperanza y redención destinado a ser compartido con todos
los seres humanos. Por eso, “la salida misionera es el modelo
de toda la obra de la Iglesia” (Evangelii Gaudium 15).
62. Como discípulos misioneros de Jesucristo, tenemos
la responsabilidad de llevar este mensaje a todas las personas,
a los que están cerca y a los que están lejos. Esto implica salir
de nuestros templos y comunidades para alcanzar a aquellos
que aún no han escuchado la buena noticia, compartiendo
el amor de Cristo de manera tangible y significativa con ellos.
Cada cristiano y cada comunidad discernirá cuál es el
camino que el Señor le pide, pero todos somos invitados a
aceptar este llamado: salir de la propia comodidad y atreverse
a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio
(Evangelii Gaudium 20).
63. Compartir la alegría del Evangelio es una expresión
de nuestro amor por Dios y por nuestros hermanos. Esto pue-
de tomar muchas formas, desde servir a los necesitados de
nuestra comunidad, hasta participar en misiones globales
que llevan el Evangelio a lugares remotos y marginados. Sea
cual sea la forma que tome, compartir la alegría del Evange-
lio es una expresión concreta de nuestro compromiso con el
mandamiento de amar a Dios y amar a nuestro prójimo como
a nosotros mismos (cfr. Jn 13, 34-36).
64. Esta pauta que nos invita a salir para compartir la
alegría del Evangelio, si nos atrevemos a asumirla con respon-
sabilidad y compromiso, sin duda renovará la Iglesia. Por eso
el papa Francisco sueña con “una opción misionera capaz de
transformarlo todo” (Evangelii Gaudium 27).