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89. La situación de pobreza es un flagelo permanente en
nuestro país. Constituye una condición socioeconómica que
afecta el ejercicio de derechos básicos: a la alimentación, a la
salud, a la educación, a una vivienda digna, a la participación
ciudadana. Todas estas personas y familias se encuentran en
una condición delicada de vulnerabilidad, la cual les provoca
sufrimiento. La pobreza atenta contra la dignidad humana,
el bienestar y la cohesión social.
90. Esta es la razón por la que los rostros de pobreza son
muy variados: incluyen a todas las personas que carecen de
los derechos antes mencionados; comprenden también a los
migrantes y refugiados, a los pueblos indígenas y originarios,
las víctimas de abusos, las madres y padres de hijos desapa-
recidos, las minorías, los trabajadores explotados, entre otros.
91. La Tierra es también un nuevo rostro de la pobreza.
El papa Francisco expresa al respecto: “Entre los pobres más
abandonados y maltratados, está nuestra oprimida y devas-
tada tierra, que «gime y sufre dolores de parto» (Rm 8,22)”
(Laudato si’ 2). La sobreexplotación del medio ambiente está
entre las causas que agudizan las situaciones de pobreza de
las personas.
1. Desafíos de la realidad
Voces de los interlocutores, asambleas parroquiales
92. Durante el segundo semestre del 2023, se les pidió a
las parroquias hacer el ejercicio de entrevistar a personas en
situación de pobreza y vulnerabilidad sobre su relación con la
Iglesia y trabajar las respuestas obtenidas en sus asambleas
parroquiales. El fruto de ese ejercicio de escucha permitió
identificar los siguientes gritos, urgencias y necesidades: