Parroquia San Bartolomé Apóstol
La Parroquia San Bartolomé Apóstol tiene una gran riqueza e historia.
Los franciscanos construyeron una primera capilla de teja y adobe en 1534. En 1622 se construyó la iglesia que vemos hoy. En 2022 se celebraron los 400 años de este suceso.
El edificio más grande se levantó junto al original en 1979.
San Bartolo Ameyalco es uno de los pueblos originarios de la alcaldía Álvaro Obregón, En lo alto de las montañas del oeste de la Ciudad, es un pueblo tradicional y agreste.
Su nombre proviene de la combinación de las palabras náhuatl cuautla (bosque) y ameyalli (fuente o manantial).
Así, el nombre podría traducirse, a grandes rasgos, como manantial del bosque. Un manantial llamado Ojo del Agua sigue suministrando gran parte del agua al pueblo. Se menciona en el Códice Mendocino con un glifo que representa un manantial que brota.
Después de la conquista, se fundó el pueblo de San Bartolo Ameyalco. El nombre «San Bartolo» es otra manera de llamar a San Bartolomé Apóstol, el santo patrono del pueblo, cuya vida posiblemente tuvo algún nexo simbólico con los anteriores dioses de la región y «Ameyalco» simbolizó el pasado prehispánico.
Gracias al esfuerzo que hicieron los españoles por unificar mediante la religión, la mayoría de los pueblos tiene un lazo muy importante con la fe cristiana.
Se le encomendó a la Orden Franciscana la enseñanza del catolicismo en esta región. En 1534 se irguió la primera capilla, la cual era provisional pues estaba hecha de adobe y tejamanil.
En el siglo XVII, año de 1622 se construye la ermita de Nuestra Señora de la Concepción que años más tarde pasaría a ser la capilla de San Bartolomé, dicha construcción se le atribuye a don Diego de Godoy… «cuyo nombre aparece escrito en una piedra labrada en la parte superior del arco de entrada al atrio» (Córdova, 2000).
«El Templo fue declarado monumento histórico en 1932» (Córdova, 2000).
La riqueza del patrimonio religioso en el país representada en templos, capillas, oratorios, santuarios, catedrales es muy amplia; este legado material pero también inmaterial constituye la herencia e identidad de cada comunidad forjada a través de un amplio periodo histórico y el pueblo de San Bartolo Ameyalco en la ciudad de México es un ejemplo de ello.
A través de la historia de la región de San Bartolo Ameyalco, se reconocen las vicisitudes que la población tuvo que enfrentar para lograr concluir esta expresión simbólica de religiosidad, en la actualidad la preocupación de mantenerla en óptimas condiciones.
Puedes visitarla en:
Aldama, San Bartolo Ameyalco, Álvaro Obregón, 01800 Ciudad de México, CDMX